Parroquias de Alcadozo y Liétor: diciembre 2011

31 DE DICIEMBRE

Me gusta este día. Nadie se casa, ni se bautiza y si el Hacedor de todo se solidariza con el tiempo casi que ni entierros nos ocupan. Como alguna vez alguien me dijera, "hoy no es día de estudiar", es noche vieja; por eso tampoco tengo la tentación de coger un libro. Por eso me gusta este día. He decidido apagar el ordenador a las 14:00 y no encenderlo hasta mañana. No tengo nada que hacer. Me gusta. Además, toda la carga de este año podemos echarla sobre la espalda de este día y decir !menos mal que acaba!. Y mañana, empieza otro año. Como decía mi madre cuando era pequeño y me veía agobiado, "acuéstate y mañana verás las cosas de otra manera". Pasamos en un instante de lo carga de lo viejo a lo liviano de lo nuevo. Ya lo dijo el poeta, "hoy nos quejamos del tiempo temblamos de terror, mañana podemos amarlo porque comprendemos sus intentos".
Y me da por compartir este puntazo con vosotros, ¿por qué no hacemos cada noche este ejercicio de novedad con tantas cosas que nos agobian y tantas personas que nos cansan?. Pues eso. A descansar hoy y buen día de mañana.

PD: Un lúcido lector del blog me ha puesto sobre aviso de lo comprometido que es el nombre de esta sección. Cuando lo miras, PUNTADAS, la mente siente la tentación no culpable de quitarle la "N", quedando así una forma gramatical no deseada semánticamente. De ahí que, a partir de hoy, la sección se llame PUNTAZOS. Gracias al reputado lector (entiéndase reputado en su significación académica)

Fco. Jesus Genestal Roche

SÓLO UN MINUTO

VALORAR LO SENCILLO
porque no sólo los héroes construyen la historia

El capitán de un submarino quiso probar la eficacia del personal de la sala de máquinas, y con este objeto dio la orden de avanzar a la máxima velocidad, y pocos segundos después de dar esta orden, de repente, mandó hacer una parada de emergencia. 
Sus órdenes fueron obedecidas al instante, y de forma eficaz. 
Se encendió el sistema de megafonía y se oyó la voz del capitán: “Os habla el capitán. Mi felicitación al personal de la sala de máquinas. Habéis parado el barco exactamente en cincuenta y cinco segundos”. 
Inmediatamente después se oyó otra voz por la megafonía: 
“Os habla el cocinero. El barco se ha parado en un tiempo récord, pero los filetes con patatas han ido a hacer puñetas. Por tanto esta noche, cena fría para todo el mundo”. 

EL EVANGELIO DE HOY

VIERNES, 30 de diciembre
EVANGELIO
Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: «Todo primogénito varón será consagrado al Señor», y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: «un par de tórtolas o dos pichones». Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: “Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel”. Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre:  «Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten, será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma». Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén. Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazareth. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba.

COMENTARIO
La Palabra de Dios hoy invita a contemplar la vida familiar. Vivimos en un mundo que ha relativizado todas las instituciones. También la familia, como lugar de la vida digna, pasa por una seria crisis de identidad y de sentido.En el evangelio vemos a toda la familia de Nazaret en el cumplimiento de los preceptos religiosos; pero más importante es verlos juntos, realizando el plan de Dios: En esta ocasión se encuentran con Ana, una mujer profetisa; ella, al igual que Simeón, ha envejecido esperando ver la gloria de Dios; y en Jesús ha hallado algo especial: Este niño es la vida nueva, es el cumplimiento de la promesa liberadora de Dios.Termina el evangelio diciendo que Jesús crecía integralmente en el seno de su familia; un rasgo que vale la pena resaltar hoy. Jesús configura su ser en la hoguera de su casa, con su familia; es allí donde aprende a amar, a servir, a trabajar y a luchar por la justicia. Contemplemos hoy a todas las familias del mundo para que sean verdaderas escuelas de vida en las que el amor, la escucha y la comprensión, sean la principal característica. 
SOBRE LA IGUALDAD
Cierta ocasión Martín Luther King se encontraba a punto de dar una de sus famosas conferencias acerca de los derechos humanos, cuando noto que un pequeño niño de color negro se encontraba al frente de su auditorio.
Se sintió sorprendido y preguntó a uno de sus ayudantes, al respecto, este le indico que había sido el primero en llegar.
Cuando termino su discurso se soltaron globos de diferentes colores al cielo, los cuales el pequeño no dejaba de mirar.
Esto llamo la atención de Martin Luther King, quien abrazándolo lo levantó en brazos.
El pequeño lo miro fijamente y le pregunto si los globos negros también volaban hacia el cielo, Martín lo vio dulcemente y le contesto:
Los globos no vuelan al cielo por el color que tengan, sino por lo que llevan dentro...

EL SANTO DEL 29 DE DICIEMBRE

SANTORAL
29 DE DICIEMBRE: 
SANTO TOMÁS BECKET
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal
Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
Santo Tomás Becket, o Santo Tomás de Cantorbery, San Trófimo y San Crescente
Destacamos a:
Santo Tomás Becket
Tomás Becket, fue arzobispo de Canterbury.  Nacio en el 1118. Era hijo de un empleado oficial, y en sus primeros años fue educado por los monjes del convento de Merton.
Tomás como buen diplomático había obtenido que el Papa Eugenio Tercero se hiciera muy amigo del rey de Inglaterra, Enrique II, y este en acción de gracias por tan gran favor, nombró a nuestro santo (cuando sólo tenía 36 años) como Canciller o Ministro de Relaciones Exteriores.
En el 1161 murió el Arzobispo Teobaldo, y entonces al rey le pareció que el mejor candidato para ser arzobispo de Inglaterra era Tomás Becket.
Cuando el rey empezó a insistirle en que aceptara el oficio de Arzobispo, Santo Tomás le hizo una profecía o un anuncio que se cumplió a la letra. Le dijo así: "Si acepto ser Arzobispo me sucederá que el rey que hasta ahora es mi gran amigo, se convertirá en mi gran enemigo". Enrique no creyó que fuera a suceder así, pero sí sucedió.
Y dicen que un día en uno de sus terribles estallidos de cólera, Enrique II exclamó: "No podrá haber más paz en mi reino mientras viva Becket. ¿Será que no hay nadie que sea capaz de suprimir a este clérigo que me quiere hacer la vida imposible?".
El 29 de diciembre de 1170 cuatro caballeros armados salieron para Cantorbery. Se le avisó al arzobispo, pero él permaneció en su puesto: “El miedo a la muerte no puede hacernos perder de vista la justicia”
Cuántos quebraderos de cabeza ha traído a lo largo de la historia la justicia ¿verdad?
Lo dijo Pascal
“La justicia sobre la fuerza, es la impotencia, la fuerza sin justicia es tiranía. “

SÓLO 1 MINUTO


SOBRE LA PRUDENCIA
Esta es la historia de un chico que tenía muy mal carácter. Su padre le quería ayudar, y le dio una bolsa llena de clavos, a la vez que le daba este consejo: “Cada vez que pierdas la paciencia, tienes que clavar un clavo detrás de la puerta”. ¡El primer día, el chico clavó... 37 clavos! Durante las semanas siguientes, a medida que el chico aprendía a controlar su mal genio, cada vez tenía que clavar menos clavos detrás de la puerta. Al final descubrió que le era más fácil controlar su genio que clavar los clavos. Y llegó un día en que pudo controlar su carácter durante toda la jornada. Enseguida informó a su padre, éste le felicitó, y después le dijo que a partir de aquel momento hiciera al revés: “Cada día que consigas dominar tu carácter, arranca un clavo de los que has clavado”. 

Pasaron los días, y el jovencito finalmente pudo anunciar a su padre que ya no quedaban clavos detrás de la puerta. Su padre le cogió de la mano, le acompañó hasta la puerta y le dijo: "Has trabajado duro, hijo mío, pero mira todos estos agujeros que han quedado detrás de la puerta... Nunca jamás será la misma que antes. Cada vez que tú pierdes la paciencia con alguien, dejas unas cicatrices igual que las que ves aquí”. 



LAS ESPIGAS
En un campo de trigo, casi todas las espigas estaban inclinadas hacia el suelo. Sólo algunas estaban derechas, y miraban con orgullo al cielo, a la gente que pasaba por el camino y a las otras espigas compañeras. “Somos las mejores”, se las oía decir. “No vivimos dobladas, no inclinamos nuestra espalda ante nadie, como si fuéramos esclavas. ¡Dominamos la situación!”. Pero el viento, que sabe mucho de lo que pasa en los campos de trigo, sonrió y dijo: “Claro que están bien derechas, es verdad... ¡Porque están vacías! No han producido ningún fruto, y no servirán para nada”. 
También puede haber personas -y las hay- que nunca se inclinan, que nunca ceden, que “dominan la situación”, y que se permiten mirar a los demás con superioridad. La pregunta es: ¿son más personas que los otros? ¿Tienen en su interior algún fruto que valga la pena. alegría, felicidad auténtica, o están vacías? 
Que no nos sepa mal ceder, acercarnos a los más sencillos e inclinarnos ante ellos, porque nuestra persona no perderá importancia, al contrario: ganará valor, porque crecerá en humanidad


LA HISTORIA DE UNA BOTELLA


En un supermercado había una botella de agua que era muy egoísta. Siempre quería lo mejor para ella: la mejor etiqueta, el mejor lugar, el mejor estante, estar bien limpia y en la primera fila, para que todo el mundo la viera bien... Nunca se le ocurriría hacer algo por los demás. Un día, una persona la cogió para comprarla, la puso en el carro de la compra y se la trajo a casa. La botella estaba muy enfadada: no quería marchar de su estante y dejar el mejor lugar a otra. Además, cuando vio que alguien intentaba abrirla para beber el agua que tenía dentro, la botella se resistió: no quería dar su agua a nadie. Por más fuerza que hacían, no consiguieron abrirla. Y, como no pudieron usarla, la devolvieron al supermercado y la cambiaron por otra. La volvieron a poner en el estante, y poco a poco, consiguió volverse a colocar en el mejor lugar, en la primera fila, para ser admirada por todo el mundo que pasaba por delante suyo. Pero, como es natural, la volvieron a comprar. Y otra vez pasó lo mismo: como no la podían abrir, la volvieron al estante. Y la vida de aquella botella fue pasando entre idas y venidas, y lo único que pretendía era estar en un buen lugar y ser admirada. Con el paso del tiempo sucedió que a la botella le llegó la fecha de caducidad: el agua que había dentro empezó a perder transparencia y, al cabo de un tiempo, ya no servía para beber. Los empleados del supermercado la retiraron y la tiraron a la basura. Aquella botella no había servido para nada. A nadie le había dado su agua para calmarle la sed. Ahora, perdida en medio de la basura, se lamentaba de lo que había hecho. Entonces se dio cuenta de que todo lo que no se da a tiempo se echa a perder. Pero ya era demasiado tarde. 
Efectivamente. Todo lo que no se da... se pierde. Que no se nos haga demasiado tarde y que nos demos cuenta a tiempo. 




LOS TRES HIJOS DEL REY
Había un rey que tenía tres hijos. Sus posesiones y riquezas eran muchas y se extendían por todo el reino. Pero su mayor riqueza eran sus tres hijos, que quería de verdad y a los que había procurado educar desde pequeños. De entre sus tesoros materiales destacaba un brillante de valor extraordinario, admirado en todo el mundo. Cuando tuviera que repartir su herencia, ¿para cuál de sus tres amados hijos sería aquel brillante tan especial? Y he aquí que el rey decidió someter a sus hijos a una prueba: el brillante sería para aquél que realizara la proeza más grande a lo largo de un día previamente señalado. Una vez pasó la jornada indicada para la prueba, la noche de aquel día cada hijo iba explicando su acción más heroica. El hijo mayor había matado un dragón, que sembraba de terror todo el reino. El hijo segundo había conseguido vencer a diez hombres bien armados, con la única ayuda de su espada. Y el tercer hijo dijo: "Yo no he tenido oportunidad de hacer ningún acto heroico. Lo único un poco interesante me ha pasado al comenzar el día: he salido de buena mañana y me he encontrado a mi mayor enemigo durmiendo junto a un precipicio que da al mar. Me han venido ganas de tirarle precipicio abajo... pero le he dejado que continuara durmiendo". Entonces el rey se levantó de su asiento, abrazó a este hijo y le entregó el brillante. 


No había duda que su gesto había sido el más heroico: ser capaz de perdonar, incluso a una persona considerada enemiga.




EL VASO DE ARCILLA Y LA COPA DE ORO
Cuenta una fábula que había un sencillo vaso de arcilla junto a una orgullosa copa de oro. La copa dijo al vaso de arcilla: "Eres muy frágil; mírame, contempla y envidia mi solidez; yo, que soy de oro, no me rompo y soy admirada por todo el mundo". El vaso de arcilla le contestó: "En los banquetes de las fiestas tú apareces como una sólida copa; pero si pasáramos por la prueba del fuego, ¿cuál de los dos resistiría más?" 
Una persona que pasaba por allí oyó la conversación, y, para comprobar lo que había oído, colocó el vaso y la copa en medio de las llamas de un fuego. Y vio que el sencillo vaso de arcilla se hacía más resistente. Y también vio cómo la orgullosa copa de oro se iba deshaciendo, incapaz de resistir el calor que desprendía el fuego. 

Las apariencias externas no siempre son signo de fortaleza interna. Si las personas basamos nuestra vida en la apariencia, en tener mucho más que los demás, es posible que no sepamos superar algunas pruebas, sobre todo cuando llegan momentos difíciles de sufrimiento o de dificultades. Las personas sencillas saben que su fuerza está en su interior, están acostumbradas a vivir renunciando a cosas que no son importantes, y son igual de felices cuando las tienen que cuando no las tienen. 













CONSTRUIR EL MUNDO
Un niño llevaba un buen rato molestando a su padre, que estaba leyendo. El padre, para que se distrajera y le dejara tranquilo un buen rato, cogió de un atlas viejo una hoja donde estaba dibujado todo el mundo. A pequeña escala estaban todos los países, regiones y ciudades más importantes. Lo recortó en muchos trozos y se lo dio a su hijo para que lo volviera a hacer. 
- Le llevará mucho tiempo, y así me dejará en paz.
A los pocos minutos, el niño volvió con el mapa del mundo perfectamente colocado. - ¿Cómo has sido capaz de hacerlo tan rápido?, le preguntó el padre extrañado.
- Muy sencillo, padre. Por detrás de los papeles que me has dado había dibujada la figura de una persona humana. Primero he reconstruido la persona y el mundo se ha formado sin dificultad.
Las personas, los hombres y las mujeres, somos los que damos sentido al mundo. Cuidar de las personas, ayudarlas, defenderlas... (aunque sólo sea la salvación de una sola persona) es la forma de cuidar del mundo. El mundo tendrá mucho más sentido, únicamente, cuando las personas sean el centro de las preocupaciones y de las atenciones.



EL VALOR DE UNA SIMPLE MANZANA
Un hombre anciano estaba en su huerto, cerca de su casa, haciendo unos agujeros en la tierra. Trabajaba con entusiasmo y con ilusión. Pasó un vecino y le preguntó qué es lo que estaba haciendo. El viejo contestó: 
- Estoy plantando unos manzanos, a ver si crecen y hacen unas buenas manzanas.
- ¿Esperas llegar a comer manzanas de estos árboles? –le dijo el vecino.
- No, no –respondió el anciano-. No pienso vivir tanto. Pero otros lo harán. El otro día pensé que toda mi vida he estado comiendo frutos de los árboles que habían plantado otras personas, y esta es mi manera de mostrarles mi agradecimiento. En mi larga vida he recibido muchas cosas de los otros. Es justo que yo colabore a que otras puedan beneficiarse de mí. 



EL VALOR DEL SILENCIO
Un anciano y famoso sabio japonés, conocido por sus pensamientos y sus doctrinas, recibió la visita de un profesor universitario que había oído hablar de su sabiduría y quería preguntarle sobre su pensamiento. Este profesor tenía fama de ser muy creído y orgulloso, de no prestar atención a la opinión de los otros porque consideraba que él estaba siempre en posesión de la verdad. El sabio, que conocía esto, decidió darle una lección. Por esto, cuando el profesor llegó a la casa del sabio, éste lo recibió y le ofreció una taza de té. Empezó a servir el té despacio hasta que la taza se llenó. El sabio, haciendo ver que no se daba cuenta de que la taza estaba llena, continuaba sirviendo té, que se salió de la taza, cayó al plato, a la mesa, ensució el mantel, empezaba a caer al suelo... Y el anciano continuaba tan feliz, como si no viera nada. El profesor de universidad contemplaba la escena sin saber qué hacer, y no se explicaba aquella distracción del anciano, que ya le parecía una falta de mala educación. Pero llegó un momento en que no pudo más y le gritó al anciano: “¡Está llena! ¿No ve que no cabe más?” Y el anciano, sin inmutarse, le contestó: “Tú también estás lleno de tu cultura, de tus conocimientos, de tus opiniones seguras e intocables, lo mismo que le pasa a esta taza. ¿Por qué vienes a aprender de mí? ¿Cómo puedo enseñarte algo, si no estás dispuesto y abierto a recibir otras ideas que las que tú tienes? ¡No te cabrá nada si no vacías tu taza!” El profesor universitario comprendió la lección, y a partir de aquel día se esforzó en escuchar 



SANTORAL

28 DE DICIEMBRE: 
LOS SANTOS INOCENTES
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal
Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
Los Santos Inocentes (por tanto quien se llame Inocente, o Inocencio), las Santas Indés, Domma, Agape y Teófila y Santa Catalina Volpicceri
Destacamos a:
Los Santos Inocentes

Nos cuenta el evangelio de San Mateo que unos Magos llegaron a Jerusalén preguntando dónde había nacido el futuro rey de Israel, pues habían visto aparecer su estrella en el oriente, y recordaban la profecía del Antiguo Testamento que decía: "Cuando aparezca una nueva estrella en Israel, es que ha nacido un nuevo rey que reinará sobre todas las naciones" (Números 24, 17) y por eso se habían venido de sus lejanas tierras a adorar al recién nacido.
Dice San Mateo que Herodes se asustó mucho con esta noticia y la ciudad de Jerusalén se conmovió ante el anuncio tan importante de que ahora sí había nacido el rey que iba a gobernar el mundo entero.
Entonces rodeó con su ejército la pequeña ciudad de Belén, y mandó a sus soldados a que mataran a todos los niñitos menores de dos años, en la ciudad y sus alrededores.
Con razón el emperador César Augusto decía con burla que ante Herodes era más peligroso ser Hijo (Huios) que cerdo (Hus), porque a los hijos los mataba sin compasión, en cambio a los cerdos no, porque entre los judíos esta prohibido comer carne de ese animal.


De todas formas hoy venía decidido a cumplir una de las expectativas de la semasna pasada. Como es Santa Catalina Volpicceri, ¿quieres saber de dónde viene el dicho de “que si quieres arroz catalina”?
Desde luego no tiene nada que ver con esta Santa, pero cuentan que en una señora llamada Catalina que vivía en los tiempos de Juan II de Castilla (o lo que es lo mismo, por el Siglo XV) y que por lo visto, además de consumir grandes cantidades de arroz, lo recomendaba a todo el mundo como remedio a cualquier mal. 

En su lecho de muerte, los vecinos se reunieron en torno a ella y recitaron a coro: “¿quieres arroz Catalina?” y otra vez “¿quieres arroz Catalina?” y al ver que ésta no respondía (la pobre estaba tan débil que no era capaz de articular palabra) le dijeron todos a coro: “¡que si quieres arroz, Catalina!”. 
Y ella, moribunda, tampoco fue capaz de contestar, pareciendo que hacía oídos sordos a lo que le decían. 
Desde entonces, esta frase se dice cuando alguien no hace caso a lo que dicen.


26 DE DICIEMBRE: 
SAN ESTEBAN
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal

Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
San Esteban y San Marino. También San Dionisio y San Arquelao
Destacamos a:
San Esteban
Se le llama "protomartir" porque tuvo el honor de ser el primer mártir que derramó su sangre por proclamar su fe en Jesucristo.
Cuando la comunidad creció, los apóstoles confiaron el servicio de la asistencia diaria a siete ministros de la caridad, llamados diáconos.
Entre éstos sobresalía el joven Esteban, quien, además de desempeñar las funciones de administrador de los bienes comunes, no renunciaba a anunciar la buena noticia, y lo hizo con tanto celo y con tanto éxito que los judíos “se echaron sobre él, lo prendieron y lo llevaron al Sanedrín. 
Esteban, como se lee en el capítulo siete de Los Hechos de los apóstoles, “lleno de gracia y de fortaleza”, se sirvió de su autodefensa para iluminar las mentes de sus adversarios, pero sus adversarios no lo dejaron continuar el discurso, porque “lanzando grandes gritos se taparon los oídos...y echándolo fuera de la ciudad, se pusieron a apedrearlo”.
Doblando las rodillas bajo la lluvia de piedras, el primer mártir cristiano murió.
En el año 415 el descubrimiento de sus reliquias suscitó gran conmoción en el mundo cristiano. 
Y mira que historia tan curiosa; cuando parte de estas reliquias fueron llevadas más tarde por Pablo Orosio a la isla de Menorca, fue tal el entusiasmo de los isleños que, ignorando la lección de caridad del primer mártir, pasaron a espada a los hebreos que se encontraban allí. 
Y ya habían pasado cuatrocientos años.
¿Que te parece?
Y es que no parece ser que hubieran aprendido la leccion aquello isleños. Goethe lo dijo muy bien unos cuanto siglos más tarde
"La venganza más cruel es el desprecio de toda venganza posible"




23 DE DICIEMBRE: 
SAN SÉRVULO
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal
Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
San Juan Cancio, San Ivés y Santa Victoria de Tivoli. Y un santo muy curioso, San Sérvulo, el Paralítico
Destacamos a:
San Sérvulo
San Sérvulo era un hombre pobre y cubierto de llagas que yacía frente a la puerta de la casa de un rico. 
En efecto, nuestro santo estuvo paralítico desde niño, de suerte que no podía ponerse en pie, sentarse, llevarse la mano a la boca, ni cambiar de postura. 
Su madre y su hermano solían llevarle en brazos al atrio de la iglesia de San Clemente de Roma. Sérvulo vivía de las limosnas que le daban las gentes. Si le sobraba algo, lo repartía entre otros menesterosos. 
A pesar de su miseria, consiguió ahorrar lo suficiente para comprar algunos libros de la Sagrada Escritura. 
Como él no sabía leer, hacía que otros se los leyesen, y escuchaba con tanta atención, que llegó a aprenderlos de memoria.
Al cabo de varios años, sintiendo que se acercaba su fin, pidió a los pobres y peregrinos, a quienes tantas veces había socorrido, que entonasen himnos y salmos junto a su lecho de muerte. 
El cantó con ellos. Pero, súbitamente, se interrumpió y gritó: "¿Oís la hermosa música celestial ?" . Y murió al acabar de pronunciar esas palabras.
A las puertas de la Navidad, una buena muerte,  ¿no crees? Porque no se si lo sabías pero el criterio para que un día sea un determinado santo es que murió ese día, por tanto San Sérvulo murió una tal 23 de diciembre

Hablando de muerte, ya que San Sérvulo murió tan plácidamente no creo que estuviera de acuerdo con la célebre cioa de Woody Allen cuando decía:
“No es que tenga miedo a morir, sólo quiero no estar allí cuando ocurra”
Nosotros, por si acaso, avisamos que estaremos aquí el lunes. Feliz Navidad




22 DE DICIEMBRE: 
SAN PEDRO CANISIO
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal

Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
San Pedro Canisio, San Flaviano, San Demetrio, San Zenón y San Isquirión
Destacamos a:
San Pedro Canisio
Es un santo relativamente reciente para lo que usamos aquí. Lo podemos situar en torno al siglo XVI. 
Es venerado como uno de los creadores de la prensa.
¿Por qué? Pues porque San Pedro Canisio tenía una especial cualidad para resumir las enseñanzas de los grandes teólogos y presentarlas de manera sencilla para que el pueblo pudiese entender.
Logró redactar dos Catecismos, uno resumido y otro explicado. Estos dos libros fueron traducidos a veinticuatro idiomas y en Alemania se propagaron por centenares y millares.
En los treinta años de su incansable labor de misionero recorrió treinta mil kilómetros por Alemania, Austria, Holanda e Italia. Parecía incansable, y a quien le recomendaba descansar un poco le respondía: "Descansaremos en el cielo"
Una muerte en paz, de las que te gustan a ti, estando en Friburgo el 21 de diciembre de 1597, después de haber rezado el Rosario
Por cierto, hablando de periodistas, me he encontado con una frse de Cherteston que no se si habla bien de vosotros o no, tu veras? , me dejas decirla?
“El periodismo consiste esencialmente en decir 'lord jones ha muerto' a gente que no sabía que lord jones estaba vivo”





21 DE DICIEMBRE: 
SAN TEMÍSTOCLES
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal
Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
San Festo, San Glicerio y San Severino, y uno un poco más raro, San Temístocles
Destacamos a:
San Temístocles
Temístocles era un nativo de Mira, en Licia, en época del emperador Decio (249-251). 
Se había desatado la persecución contra los cristianos y el gobernador de la provincia, en ejecución de los decretos imperiales, hizo buscar al notorio cristiano Dioscórides, que estaba escondido en una montaña, cerca del lugar donde Temístocles, que era pastor, llevaba sus ovejas. Los enviados del gobernador, encontrándolo, lo interrogaron sobre el prófugo, pero se negó a denunciarlo y él mismo inesperadamente se declaró cristiano. Detenido, fue llevado de inmediato a la presencia del gobernador Asclepio, que lo interrogó y que al confirmar su fe lo condenó a muerte, lo que ocurrió después de mucho tormento. Como le pasó a todos lo mártires. 
Y este emperador, Decio, mira que era sanguinario el hombre
En cualquier caso, Temístocles es el ejemplo de una auténtica lealtad

y... nos ponemos un poco pedantes, como dijo Ortega.

"La lealtad es el camino más corto entre dos corazones"













20 DE DICIEMBRE: 
SANTO DOMINGO DE SILOS
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal

Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
Santo Domingo de Silos, San Liberato, los Santos Eugenio y Macario y San Ursicino
Destacamos a:
Santo Domingo de Silos
¿Has estado alguna vez en Santo Domingo de Silos?. Precioso el claustro románico y la farmacia, no te la pierdas.
Nace alboreando el siglo XI en Cañas, cerca de Nájera. Entra en el antiguo y observante cenobio de San Millán de la Cogolla, tomando el hábito negro de San Benito Los monjes de San Millán vuelven los ojos a él y le piden sea su prior.
El rey don García de Navarra, le pide los tesoros del cenobio;  Pone cara al rey y defiende lo que es patrimonio de su casa y de su iglesia. Esta actitud le valió el destierro voluntario a las tierras de Castilla donde reina el hermano de don García. El bondadoso rey Fernando, le encomienda poner en pie el monasterio —por entonces en ruinas— de San Sebastián de Silos. Llegan más y más gentes al calor del monasterio, convirtiéndose los alrededores del pueblo en un foco de economiía y trabajo, también suenan las campanas que llaman a Vísperas, a Misa y a los rezos. De ahí, todavía,  la importancia del canto Gregoriano de los actuales monjes de Silos.
Muy famosos son los milagros del Santo. Te cuento uno

Se conoce que un criado llamado Juan tenía bien cuidada la huerta del monasterio: era de buenos puerros . De puerros y algo más, pues despertó la codicia de algunos ladrones, que una noche penetraron en la huerta para hacer acopio y marcharse. 
Pero su intento se vio defraudado por extraña manera. Empujados por fuerza misteriosa, en vez de arrancar las hortalizas se ponen a cavar en un barbecho y, sin darse cuenta, prosiguen afanosos su trabajo en tan ruda tarea hasta el amanecer. 
Entonces el Santo llama al mayordomo, sonríe misteriosamente y le manda preparar suculento almuerzo para algunos obreros. Él, entretanto, se dirige a la huerta, donde aquellos hombres continúan aún en su tarea. 
-Vaya -les dice-, ya habéis trabajado bastante ; Dios os lo premiará. Venid conmigo, que tenéis preparada la comida. Ellos, avergonzados, siguieron al Santo, que, sonriente y cortés, los llevó al refectorio, donde desayunaron. Únicamente, al entregarles el jornal por su trabajo, les dijo suavemente: Amigos, os perdono la mala intención.

Santo Domingo puso en crisis el refrán que dice:
“ Se cree el ladron, ... que todos son de su condición”





19 DE DICIEMBRE: 
SAN NEMESIO
© ONDA CERO. El Santoral de Genestal
Hoy celebran su onomástica quienes tengan por santo a:
San Nemesio, los Santos Darío y Secundino, y San Ciriaco. También Santa Fausta
Destacamos a:
Santa Nemesio

La historia de Nemesio  es la de un hombre fiel y cabal que era uno más del pueblo. Se le estimaba entre los que más del pueblo por la conducta justa y sus costumbres sanas; en fin, apreciado por su bondad y conducta ética intachable.
Pero había envidiosos. Lo acusaron de cooperar con canallas que fueron perseguidos, presos y condenados a la pena de muerte. Pronto el juez pudo declarar absuelto a Nemesio.
Pero los enemigos de Nemeso le decían al juez: “Te ha engañado; es hábil, conoce todo tipo de engaños... ¿no sabes que es cristiano?”
Y al juez le tocaron la moral y el final te lo puedes imaginar
Ay...la envidia

Lo decía el gran Séneca
“ Si estás libre de enemigos porque a nadie hiciste injuria, no faltarán otros que lo sean por envidia”