San Eutiquio, San Efebo, San Desiderio, San Honorato y San Siagrio
Destacamos a:
San EutiquioEs curiosa la historia de San Eutiquio. Eutiquio, junto a Florencio, llevaban una vida de comunidad solitaria en la provincia de Norcia, pero Eutiquio fue elegido abad de un monasterio cercano.
Cuando Eutiquio llegó a ser Abad, Florencio permaneció solo y, sufriendo, pidió al Señor que le enviara un compañero.
Apenas salió del oratorio encontró un oso, al cual dio el encargo de llevar a pastar un pequeño rebaño de cuatro o cinco cabras, trabajo que el animal cumplía con cuidado.
Pero cuatro monjes de Eutiquio, envidiosos del milagro de Florencio, mataron al oso, causándole vivo dolor.
Eutiquio intentó consolar a Florencio, pero éste, inconsolable, pidió al Señor un severo castigo para los culpables, quienes, presos de una misteriosa enfermedad, murieron miserablemente.
Desde entonces Eutiquio y Florencio se nombran juntos, pero solo es considerado santo, Eutiquio.
Y es que la envidia... !Cuánta felicidad quita la envidia!. El gran Séneca afirmaba
“No tengamos envidia de los que están encaramados, porque lo que nos parece altura es despeñadero”